sábado, 26 de enero de 2013

El dominio soviético del Hockey sobre hielo

El hockey sobre hielo tenía bastante popularidad en la URSS. Con anterioridad a la Revolución de Octubre, ya se practicaba este deporte en las zonas más frías de Rusia, aunque no tenía la afición que consiguió en la segunda mitad del siglo XX. En 1946 se pone en marcha el Campeonato de la URSS, que se celebraría hasta 1991.

El Dynamo de Moscú es el primer vencedor del campeonato soviético. El CSKA de Moscú fue el equipo que dominó esta competición, siendo el más laureado de los 45 campeonatos. Otros equipos notables fueron el Spartak de Moscú, el Torpedo de Nizhny Novgorod, el SKA de Leningrado, el Tractor de Chelyabinsk, el Sokol de Kiev, el Dynamo de Riga etc.

En 1952 se forma la selección soviética de hockey. En 1954 participa por primera vez en el campeonato mundial, proclamándose vencedor de ese mundial celebrado en Suecia. La selección soviética de hockey participó en 34 campeonatos mundiales, ganando 22 de ellos y demostrando su dominio aplastante. En los Juegos Olímpicos de invierno participó en 9 ocasiones, consiguiendo 7 medallas de oro y 2 de plata. Con este dominio del juego, la selección soviética se ganó el apodo de "máquina roja".
El equipo soviético en los JJOO de invierno de 1956
Celebrando la medalla de Oro en los JJOO de Grenoble 1968
El gran rival de la Unión Soviética fue la selección canadiense. Los duelos entre ambas selecciones fueron seguidos con gran expectación en todo el mundo, no sólo por ser los mejores equipos, sino por que se producen en plena guerra fría.

Con estos resultados, algunos jugadores soviéticos se convirtieron en leyenda de este deporte. Es el caso de Alexander Maltsev, que consiguió anotar 321 goles con la selección. En el año 2008 la Federación Internacional de Hockey (IIHL) eligió a los mejores jugadores de todos los tiempos. De los 6 jugadores elegidos como el mejor equipo de todos los tiempos, 4 de ellos son soviéticos:
  • Vladislav Tretiak: Elegido como el mejor portero del mundo. Rechazó millonarias ofertas para jugar en el Hockey norteamericano. Es una leyenda en el CSKA de Moscú, en donde ganó 13 ligas soviéticas.
  • Viacheslav Fetisov: El mejor defensa de todos los tiempos. Después de retirarse, ocupó cargos de responsabilidad en organismos deportivos internacionales y de la Federación Rusa.
  • Serguei Makarov: Mejor atacante secundario. Ganó 8 campeonatos del mundo y 2 oros olímpicos.
  • Valeri Kharlamov: Mejor delantero principal. Hijo de una española emigrada a la URSS a causa de la guerra, ganó 2 oros olímpicos, 8 campeonatos del mundo y 11 campeonatos soviéticos. Murió muy joven en un accidente de tráfico, con tan solo 33 años de edad.
Alexander Maltsev, máximo goleador de la selección soviética
Valeri Kharlamov, hijo de una de "las niñas de la guerra" española llamada Begoña

viernes, 18 de enero de 2013

El importante papel de los artistas en el cerco de Leningrado

En el invierno de 1941-1942, la ciudad de Leningrado se encontraba asediada por las fuerzas ocupantes del ejército nazi. El hambre y el frío dibujaban un panorama trágico y oscuro. Aún así, la vida no se paró. Con la ciudad completamente rodeada por el ejército alemán, la moral de sus habitantes se hacía imprescindible para obtener la victoria en aquellas duras condiciones. En este aspecto jugaron un importante papel los artistas e intelectuales de la ciudad, que supieron cumplir con la responsabilidad que les imponía la historia.

La radio no dejó de emitir ni un sólo minuto. En la Academia de Bellas Artes, los artistas trabajaban casi a oscuras y con un intenso frío. Durante los casi 900 días de asedio, la actividad de los artistas se intensificó notablemente con sorprendente energía y pasión.

La Unión de Artistas de Leningrado, no sólo aportó hombres al ejército, si no que se encargaron de la protección y el camuflaje de importantes edificios. Cada mañana aparecían nuevas pintadas y dibujos en las calles llamando a la resistencia. Los dibujantes ilustraban los periódicos, así como los carteles pegados en las paredes.
El hambre y los bombardeos se llevaron a más de un centenar de artistas. Otros fueron evacuados por la carretera de hielo que cruzaba el lago Ladoga. Apenas 80 miembros de la Unión de artistas permanecían en Leningrado, cuando deciden reunirse en un edificio para pintar, discutir etc. Es a principios de 1942, cuando se produce todo una explosión artística e intelectual en mitad del caos. En ese momento la Unión de Artistas comienza a realizar exposiciones permanentes y móviles (llevando el arte a los hospitales, unidades militares etc.) 

El 12 de enero de 1943, el Ejército Rojo comandado por Voroshilov y Zhukov, iniciaba la "Operación Iskra" con el objetivo de romper el cerco de la ciudad. El 18 de enero, los soviéticos conseguían estabilizar un corredor que unía la ciudad con el exterior. Desde ese momento, suministros de todo tipo pudieron abastecer a Leningrado. La alegría se disparaba. Aunque los bombardeos continuasen, por lo menos el hambre desapareció desde aquel día. La posibilidad de vencer al enemigo es vista por los artistas, que harán todo lo posible porque se haga realidad.
En mayo de 1943, se inaugura la Exposición de Primavera de los Artistas de Leningrado. La fe en la victoria era ya infinita. A pesar de que los nazis estaban a las puertas de la ciudad, a pesar de los bombardeos, a pesar de todas las calamidades que acababan de superar, los habitantes de la ciudad estaban convencidos de la victoria de sus defensores.

Que este artículo sirva para homenajear no sólo a los valientes soldados que combatieron para romper el cerco de Leningrado, si no a los artistas que mantuvieron alta la moral en unos difíciles momentos. No sólo en Leningrado, los artistas e intelectuales jugaron siempre un papel fundamental en la Guerra que los soviéticos libraron contra el nazismo. A continuación algunas de las obras hechas en el cerco de aquella ciudad.
Los artistas en Leningrado (en ruso)
Yudovin
Neprintsev
N. Sutsin
V. Serov
B. Bogatkin
Vasilev

martes, 15 de enero de 2013

1905: La huelga en la fábrica Putilov y el domingo sangriento

Ilustración de lo que fue el domingo sangriento
El 15 de enero de 1905 (3 de enero según el calendario juliano de la época) 12.600 trabajadores de la planta metalúrgica Putilov acordaban ir a la huelga ante el despido de cuatro obreros. El paro era total. Hartos de tanta injusticia, no sólo reclamaban la readmisión de los compañeros despedidos. Exigían una jornada de 8 horas, atención médica, supresión de horas extraordinarias, fijación de salarios mínimos etcétera. Esta huelga supuso el desencadenante de la Revolución de 1905.

La huelga fue convocada por la "Asamblea de trabajadores fabriles" de Petrogrado y dirigida por un sacerdote ortodoxo, el padre Gapón. La paciencia para aguantar las condiciones humillantes de aquellos trabajadores se acabó con el despido injustificado de los cuatro compañeros mencionados.
Pintura dedicada a los obreros de la fábrica Putilov
Dos días después fueron repartidos miles de panfletos, animando a la huelga en otras fábricas y empresas. Ante la negativa de la empresa para negociar con los trabajadores, el día 20 Petrogrado se encuentra totalmente parado debido al éxito de la huelga general.

Aquella huelga general había sido un éxito. Sólo faltaba culminar con la manifestación pacífica hasta el Palacio de Invierno para entregar las demandas al Zar. Allí, el ejército zarista disparó contra los manifestantes desarmados en el crimen que pasó a la historia como "Domingo Sangriento". 

Lo que había comenzado como una protesta obrera ante el despido de cuatro trabajadores, acabó siendo todo un estallido de desobediencia revolucionaria. La multitud de obreros asesinados en el domingo sangriento era una vuelta más de tuerca a la humillación e injusticia que padecía la clase trabajadora en época zarista, pero también era la gota que colmaba el vaso.
Obreros de la fábrica Putilov, tras la revolución de 1917
A partir de aquellos sucesos, la rebeldía recorrió la geografía del imperio ruso. Se desataría toda una serie de insurrecciones campesinas durante más de tres años y toda una serie de huelgas en las fábricas. Violentos enfrentamientos entre obreros y militares se sucedían en Riga, Varsovia, Moscú etc. También se sumaron a las protestas los intelectuales, militares y minorías nacionales. Era el inicio de la Revolución de 1905.

Aquellos obreros del metal de la fábrica Putilov, mientras se reunían para debatir las demandas o las acciones a tomar, estaban sirviendo de ejemplo a la clase obrera de toda Rusia. Las enseñanzas de la Revolución de 1905 fueron cruciales para la organización de la Revolución de 1917.
Domingo sangriento
El padre Gapón en una asamblea de trabajadores


Manifestación por la huelga en Petrogrado
Grabado que ilustra la fábrica Putilov
Pintura que ilustra las demandas obreras en la fábrica Putilov
 
La manifestación en Petrogrado fue una matanza de obreros desarmados

miércoles, 9 de enero de 2013

Falleció el último piloto español de la aviación soviética

Luís Lavín con su esposa
Luís Lavín fue uno de los 3.000 niños y adolescentes exiliados a la URSS para huir de la guerra en España. Después de huir del infierno de la guerra iniciada por el fascismo en España, Luís tuvo oportunidad de combatir al enemigo en la URSS. Allí no estaba indefenso mirando aterrado hacia el cielo, allí combatió al enemigo en el aire, cara a cara. En 1993 regresa a España, a Castellón, en donde pasó los últimos años de su vida en el total anonimato y olvido.

Luis Lavín nació en Bilbao en 1925. En junio de 1937 se embarca en el Habana, camino del exilio con tan sólo 12 años de edad. Las autoridades soviéticas le instalaron en una casa de jóvenes en Ucrania, en donde además de darle educación y todo tipo de atenciones, aprendió a utilizar armas. Los niños españoles, aún recordaban como los bombarderos fascistas descargaban sus bombas contra la población sin cazas que les protegieran. Este amargo recuerdo hizo a Luís interesarse por la aviación.

A finales de 1940, ingresa en un club de vuelo de Moscú y al año siguiente en una escuela de vuelo militar. Con el estallido de la guerra, Luís queda en la retaguardia con la misión de formar a pilotos en el uso de nuevos modelos de aviones. Estaba encuadrado en la 36 División Aérea en el 826 regimiento de cazas. Allí, cerca de Stalingrado es donde entra en combate pilotando un I-16. No va al frente, pero los bombardeos alemanes les obligan a combatir.
Es trasladado a la localidad de Peski (Kazajstán) por donde pasaban las columnas y los suministros hacia Stalingrado. Allí pilota un LA-7, un caza mucho más rápido y moderno. Tenía la misión de escoltar cuadrillas, apoyar a la infantería y proteger al areródromo.

Tras la victoria soviética, Luís se casa con una enfermera ucraniana destinada anteriormente en Stalingrado. En 1948 abandona el ejército y comienza a trabajar en una fábrica aeronáutica en Saratov. En 1956, regresa a España junto a su mujer. Al volver, es interrogado y la policía no deja de seguirle y acosarle. En esa situación, Luís aguanta en España algo más de un año antes de regresar a la URSS.

En 1993 regresa a España engañado por las autoridades, que le prometen ciertas garantías. En Rusia tenía 4 pagas de jubilación, pero pierde el derecho a cobrarlas una vez abandona el país. Olvidado por ambos gobiernos queda en una situación de total pobreza. Sin posibilidad de trabajar por su edad y las secuelas físicas de la guerra, se ve obligado a recurrir a la caridad de ONGs para poder comer.

Luís Lavín ha fallecido en el más absoluto olvido. Una situación vergonzosa hacia alguien que luchó contra el fascismo en defensa de la democracia. Nuestro agradecimiento eterno a estos héroes anónimos como Luís Lavín, que sin exigir nada a nadie comprendieron el sentido de la lucha por la igualdad, por la vida y por la dignidad humana.
Modelo de La-7, como el que pilotó Luís Lavín

http://www.rkka.es/Entrevistas/luis_lavin/index.htm

jueves, 3 de enero de 2013

Más de la mitad de los rusos lamentan el colapso de la URSS

 Más de la mitad de los rusos lamentan la desaparición de la Unión Soviética que habría cumplido 90 años, según una encuesta realizada por el Centro de Investigación de Opinión Pública de Rusia. El 56% de los encuestados lamentan que la URSS se desintegrara en 1991. El sentimiento de nostalgia es especialmente fuerte entre personas mayores de 45 años (70-83%), es decir entre personas que conocieron la URSS de primera mano. El sentimiento de nostalgia desciende en las generaciones más jóvenes, debido a la propaganda antisoviética y a la falsificación de la historia.

La URSS satisfacía las necesidades a la población, el capitalismo ha favorecido únicamente a una casta de oligarcas. Hasta la Perestroika, las personas soviéticas tenían acceso a una sanidad y una educación excepcional. La vivienda no suponía un problema, el paro apenas existía. Es lógico por tanto que los ciudadanos de la URSS recuerden aquella época con felicidad y nostalgia.
Trabajadora en una fábrica de automóviles
Fue con la Perestroika cuando en la URSS comenzaron a verse situaciones dramáticas. La Perestroika imponía la liberalización de los precios y la libre competencia, bajo el pretexto de fomentar la eficiencia económica y la competitividad. Esto produjo una feroz competencia y una caída inmediata de los precios. Tras unas semanas de feroz competencia, las empresas prefirieron dejar de producir antes que vender por debajo del coste de producción. Esto es lo que dio lugar a un total desabastecimiento de los mercados. No son pocas las voces que afirman que esta situación fue perfectamente provocada y planificada.

Tampoco hay que olvidar el referéndum en el que los ciudadanos soviéticos se mostraron a favor de mantener la URSS con más de un 70% de votos a favor, o el bombardeo al parlamento en 1993.
Los enemigos de la URSS intentan dar una visión de la época soviética como triste y monótona, una visión que poco a poco va calando en las generaciones más jóvenes. Sin embargo, esto contrasta con quienes sí vivieron la URSS de primera mano y su economía socialista. Un ejemplo que puede venir al caso es el del Patriarca Kiril (cabeza de la iglesia rusa y nada sospechoso de comunista) que afirmaba este verano que en la Unión Soviética se estaba construyendo la felicidad humana. 

Para desear un feliz 2013 a todos los amantes de la historia y la cultura soviética, dejamos una serie de imágenes de aquella época que más de la mitad de los rusos lamentan que se acabara.